Economía colaborativa en tiempos digitales

¿Sabes qué es lo mejor de tener a tu disposición un ordenador con conexión a Internet? Que puedes hacer desde la comodidad del salón de tu casa casi todas las operaciones y trámites que en la era analógica solo podían hacerse de forma presencial. Las compras es uno de los sectores donde más se ha hecho notar este efecto, convirtiendo Internet en un gran centro comercial a nivel mundial, donde todas las empresas tienen capacidad para competir entre sí y, gracias a las empresas de transporte, también capacidad para surtir de sus productos a todo el mundo.

Eso supone al mismo tiempo una amenaza y una oportunidad para las empresas. Hay que saber coger a tiempo el tren de la tecnología antes de que pase de largo, porque de lo contrario los empresarios corren el riesgo de ver perder su posición de supremacía, en caso de ser empresas punteras, o de desaparecer sin remedio, en el caso de estar en el vagón de cola y viviendo al día.

Hablando sobre este tema, podemos encontrar un ejemplo del cambio de los tiempos en lo que respecta a las prácticas comerciales visitando esta web. Se trata de una guía de desguaces de España, en la que un cliente cualquiera puede encontrar en tan solo un minuto cualquier empresa de desguace que se encuentre cerca de su domicilio y que esté registrada en su base de datos. 

Pero no solo eso, ya que lo realmente interesante de este modelo es que pone en conjunto la información de stocks de todas las empresas acogidas a este modelo, haciendo que la unión de muchas pequeñas empresas se transforme en una macro empresa con un stock muy considerable, y en perfectas condiciones de competir con cualquier desguace del resto de España, sea cual sea su tamaño.

Lo que demuestra este modelo es que para competir con las grandes no hace falta una inversión millonaria en infraestructura y publicidad (aunque una cierta inversión siempre es necesaria, como es lógico), sino que con la participación de muchos actores implicados en una misma meta se puede conseguir recortar costes y conseguir una gran difusión a un precio muy bajo.

Las empresas ganan de esta forma y también lo hacen los usuarios, que tienen centralizada en un único sitio la información que buscan en torno a un tema en concreto, además de otras muchas facilidades en el proceso de compra, y ganan las empresas que de ese modo consiguen atraer a muchos clientes a un único lugar. Incluso aunque se repartan las ganancias, el beneficio sigue siendo mayor que si cada uno fuera compitiendo entre sí sin mostrar colaboración de ningún tipo. La nueva economía será colaborativa o no será.